El relato de acontecimientos astronómicos conservado en la Crónica BM 32312, permite su datación en el año 652 antes de nuestra era. El nombre del rey y el año de su reinado están borrados, pero estos datos pueden ser proporcionados gracias a una referencia histórica mencionada en la crónica, que declara que el vigésimo séptimo (27º) día del doceavo mes, el rey de Babilonia participó en la batalla de Hiritu. Esta batalla también se menciona en la Crónica Akitu (BM 86739) redactada por un escriba encargado de anotar las interrupciones de las celebraciones de Akitu. Esta crónica dice así:

    "En el año 16 (del reino) de Shamash-shuma-ukin, desde el mes de Ayyar al de Tebet, el mayordomo efectúa una selección en Akkad. En el mes de Tebet, en el día 19, Asiria y Akkad entraron en guerra. Esquivándose al enemigo, el rey volvió a Babilonia. En el mes de Addar, en el día 27, el ejército de Asiria y el ejército de Akkad libraron batalla en Hiritu. El ejército de Akkad rompió el combate y le fue inflingida una derrota aplastante. El estado de guerra se prolongó; las batallas se sucedieron".
Mesopotamian Chronicles; nº 20, J.J.Glassner.

    La combinación de las informaciones de estas dos tabletas permite datar el décimo sexto año (16) de Shamash-shuma-ukin, cómo el año 652 al 651 antes de nuestra era. Ptolomeo atribuye 20 años de reinado a este rey que llama Saosdouchinou, 22 años a su sucesor Kinilanadanou (Kandalanu) y 21 años a Nabopolassarou (Nabopolassar). Estas crónicas confirman pues los datos de Ptolomeo.